sábado, 22 de diciembre de 2012

EL LAND ART


 El land art puede ser fácilmente distinguible. Se trata del arte realizado en la tierra, en espacios naturales. Suele estar muy relacionado con el deseo de una búsqueda de regreso a lo natural, a los orígenes, e incluso con lo ecológico. De nuevo volvemos a la idea de contraposición a la industrialización, que ya habíamos visto en el resto de tendencias. Es más, también se aleja del mercantilismo del arte. Son obras al aire libre por lo que están abiertas a todo el mundo de forma gratuita aunque curiosamente los lugares escogidos suelen ser sitios más bien alejados o abandonados.

El Land Art es una corriente artística surgida a finales de los años sesenta en los Estados Unidos. Emplea los paisajes y elementos de la naturaleza como escenarios y medios para realizar una obra de arte, alejado de los modos tradicionales, en respuesta a la comercialización del objeto artístico, como lo son las obras de caballete y las esculturas.

El principio fundamental del Land Art es alterar, con un sentido artístico, el paisaje, para producir el máximo de efectos y sensaciones en el observador. Se pretende reflejar la relación entre el ser humano y la naturaleza a partir del medio ambiente y el mundo. Puede ubicarse dentro de las manifestaciones del Posmodernismo.

En El Salvador, Gladys Fuentes (1954) es de las pocas a artistas que trabajan en el Land Art. Gladys ha presentando obras con troncos en el área de las ruinas prehispánicas de San Andrés, ha empaquetado fuentes en el área urbana, ha empleado la tela en las playas y ha entelado árboles en los parques de San Salvador.

El Land Art es una manifestación artística que posee múltiples recursos y se plantea llamar la atención sobre la naturaleza y el devenir de la misma en las sociedades industriales, o bien, alineadas por una sociedad de consumo.

Este tipo de arte es muy interesante ya que se le dio vida al Teatro Nacional, y que ademas fue tan bonita la experiencia desde el momento que fuimos a reservar nuestro árbol hasta forrarlo y de alguna manera decorarlo a nuestro estilo, junto  a nuestros amigos que nos colaboraron, seria bueno que este inicio de land art se hiciera todos los años.




   










sábado, 8 de diciembre de 2012

EL BARROQUISMO




Antes del siglo XX, los cambios estilísticos se generaban a partir de los cambios políticos, sociales, económicos y/o religiosos.

En el siglo XVII, por ejemplo, los movimientos políticos generaron transformaciones económicas, como aquel momento en el que la Iglesia de Roma incurrió en la venta de indulgencias para concluir la construcción del Vaticano. Esto provocó el descontento del bajo clero, deviniendo en el nacimiento de la Iglesia Protestante, y condujo a la Iglesia de Roma a crear el estilo de la contrarreforma, que en Arte se llamó “barroco”. La idea era crear una forma más dramática e impresionante de hacer Arte y Arquitectura a fin de sugestionar a las masas y redimirlas hacia la Iglesia más antigua.

La evolución del barroco

Este estilo pronto fue adoptado por los gobernantes de corte absolutista, que lo impusieron en sus cortes. Así, las formas curvas, los entrantes y salientes, los planos profundos, las superficies alabeadas, los revestimientos dorados, las lámparas de cristal, los textiles pesados, y los colores fuertes y oscuros, se apoderaron de los interiores de iglesias y palacios.

Hasta el siglo XVIII, el barroco fue el estilo imperante en el mundo occidental. En países como Francia e Inglaterra recibió el nombre del “gobernante de turno”. Entre los estilos menores estuvieron el Luis XIV, Luis XV, Reina Ana, George II, o Early Georgian, todos pertenecientes al periodo barroco.

Aunque hubo un ‘brote’ de barroquismo durante el siglo XIX, no fue sino hasta 1950 cuando volvimos a ver a este estilo empoderarse como toda una tendencia. Este resurgimiento se debió a la reacción que se produjo ante la racionalidad que impuso la Segunda Guerra Mundial, y que se asoció al Arte y a la Arquitectura moderna, con su limpieza  de formas, simplicidad compositiva y escasez de elementos decorativos.

Durante la década de 1980 hubo un ligero asomo de barroquismo, aunque solo en concepto. Las formas se volvieron voluptuosas, intrincadas y elaboradas. No obstante, y en general, lucieron bastante nuevas.

Veinte años después, y tras haber experimentado la búsqueda de la naturalidad, de la espiritualidad Zen y de otras filosofías del Extremo Oriente, y sobre todo, después del reinado del minimalismo nadie creía posible el retorno del barroquismo, que en teoría tiene muy poco que ver con nuestro mundo moderno.

El barroquismo de hoy día

Si bien es cierto que nuestra civilización se caracteriza por la búsqueda de la novedad, tampoco es menos cierto que la consecuente inclinación al cansancio consumista -que experimenta toda la sociedad ante las modas aceptadas y puestas en boga- es aprovechada por los mercados productores de objetos y modas, para etiquetar de “obsoletos” y “demodé” a los muebles, accesorios y demás componentes del diario vivir, con el objetivo de imponer o “sugerir” otros nuevos.

En general, lo que se considera nuevo en interiorismo y moda, debe oponerse conceptualmente a lo establecido con la introducción del concepto barroco (complejidad, decorativismo, curvas exuberantes, implementación de los tonos dorados, exageración, monumentalidad, teatralidad…). Sin embargo, la nueva decoración contradice todas las acepciones consideradas como válidas hasta ahora.

No obstante, la tendencia actual apunta a aceptar las bases de la modernidad del siglo XX en general, por lo que este nuevo barroquismo deberá combinar los elementos propios del estilo, como los muebles Luis XV -tapizados en tonos insólitos como el marrón, violeta o fucsia, más propios de los años 1950, 1960 y 1970-.

Además, las maderas ya no serán necesariamente doradas, sino blancas, negras y hasta rojas. El cristal estará presente en los accesorios y, por supuesto, en las lámparas colgantes, en los chandeliers que asumirán nuevas formas, en los cristales resplandecientes, en color natural, ámbar o gris. Por su parte, los textiles habrán de recuperar la sensación de opulencia, que perdieron durante el minimalismo.

Las terminaciones serán tornasoladas. Los brocados y damascos se emplearán en la tapicería y en las cortinas. Las texturas serán aún más ligeras que las imperantes durante la década de 1980.

En cuanto a los muebles, se reintroducen los revestidos en espejo, a fin de aumentar el efecto de opulencia en los detalles. Objetos como los candelabros vuelven a estar de moda, en materiales como el cristal o el plateado resplandeciente.

Asimismo, los marcos de los cuadros y de los espejos se recubren de pan de plata; mientras que las maderas oscuras continúan en boga, así como los tonos turquesa y el azul violeta. Todo esto deberá combinarse con piezas de mobiliario de líneas simples y limpias, y con tonalidades muy claras.



Hay que hacer notar que este nuevo barroquismo se constituye más bien en un nuevo ingrediente que se suma a la sopa estilística del siglo XXI, caracterizado por el eclecticismo de las tendencias del siglo anterior y acompañado por la introducción de nuevos materiales y de combinaciones de colores y texturas.     



 


ART CAMP


Camp es un tipo de sensibilidad estética del arte popular que basa su atractivo en el humor, la ironía y la exageración. también es una corriente artística relacionada con las formas del arte kitsch, considerado como una copia inferior y sin gusto de estilos existentes que tienen algún grado de valor artístico reconocido. 

Suelen identificarse sus cualidades atractivas bajo los parámetros de la banalidad, la vulgaridad, la artificialidad,  el humorismo, la ostentosidad y el carácter afeminado. En el habla inglesa, suelen aplicarse los adjetivos de campy o cheesy a expresiones culturales que tienen cualidades de la estética camp. En pocas palabras es  aquel arte que esta sobrecargado o exagerado lleno de colores y formas, que da vida, a lo que nosotros lo vemos raro o de muy mal gusto, eso es art camp. 

Se dice que es la nueva forma de expresarnos en cuanto a la realidad de la sociedad, con muchos colores que son como las ironías de la vida y que no se tarta de hacerlos artesanías, sino mas bien darles un concepto de la realidad en la que vivimos.  

Podemos observar las ventas de adornos de navidad, hay una variedad de colores, y la forma en que las muestran para que los clientes puedan comprar. Ahora que ya sabemos que esto se trata de un arte veamoslo como tal y aprendamos de el, a apreciarlo y valorarlo.

 Existe en todo El Salvador, presente en diferentes formas,  tamaños y colores, desde una tiendita móvil, ambulante, hasta las salas de nuestras casas, los cuartos de los bebes, adornados de diferente manera. también a nuestras casas representado en  los sillones de nuestra sala-comedor los cuales son forrados con diferentes  telas, diferentes diseños, diferentes tamaños para que duren más y no se ensucien, presentado en frases típicas, rótulos, anuncios, productos, melodías y armonías las cuales suscitan y dan vida a la cultura salvadoreña. 

De baja apreciación y menosprecio, presente y necesario que cumple un propósito, que ocupa un lugar en el espacio, arte extraño denominado comúnmente como  una “gran indiada o bajero” es la evolución del barroco, que tiene muchas influencias mexicanas, francesas, centroamericanas. El art camp es un arte que se puede apreciar en cualquier lugar, debido a que es preferible que suene extranjero a que suene local, bajero y común.


En la búsqueda de posicionar la idiosincrasia salvadoreña, esto pretende desarrollar una nueva y popular forma de expresión en cuanto a la realidad de la sociedad, con muchos colores que son parte de  las ironías de la vida y que no se pretende hacerlos artesanías, sino mas bien darles un concepto de la realidad en la que se vive.

Nuestra vida cotidiana es  un arte,  veámoslo como tal y aprendamos de él, al comenzar a expresarse de esta forma se puede hacer consciencia sobre la importante de mantener nuestra cultura común, de valor agregado, vocación de servicio, de atención al cliente; se puede concluir desde un enfoque comercial que las diferentes expresiones de artes desarrollado por los micro-empresarios, hasta vendedores informales envían un mensaje, envían una señal, envían un deseo, superación, esfuerzo, calidad en las diferentes actividades comerciales.

 Otro enfoque es la necesidad de especializar a los negocios formales e informales estos buscan llamar la atención de sus consumidores haciendo un marketing cultural, dotado de pureza y sencillez, la denominada rebusca por los clientes y por los ingresos que permite y generan ingresos a las familias salvadoreñas, otro enfoque es el creativo el cual hace uso desde el humor, diseños creativos hasta morbosos con el fin de generar y obtener la atención del cliente.

Los diferentes menús de los restaurantes y ventas informales, nos dice que existe una sociedad creativa, en su poco o mucho nivel académico lo cual permite la existencia del Art Camp, este arte es evolutivo, y entre más recursos tecnológicos, artísticos  se dispongan  mayor será el impacto que tenga en la sociedad y los consumidores.  Por el momento se considera que tendremos Art Camp para mucho tiempo más.

Podemos también observar el art camp en las modas, por ejemplo, muchas personas utilizamos demasiados prendas de colores a la misma vez, o demasiados accesorios, ootro ejemplo son los vestuarios de los grupos de danzas, cargados de colores fuertes y llenos de accesorios.






CATEDRAL DE SAN MIGUEL. ARTE ECLÉCTICO



La Catedral de San Miguel es el monumento por excelencia de la Ciudad, representa el orgullo y la religión del pueblo migueleño. Es la imagen que todos tienen en mente cuando se menciona la ciudad oriental. Su altura es imponente y su estilo arquitectónico ecléctico, combina varias corrientes que denotan la belleza de sus acabados.

Cuando hablamos que tiene un estilo  ecléctico arquitectónico estamos hablando de que  es una tendencia artística en arquitectura que mezcla elementos de diferentes estilos y épocas de la historia del arte y la arquitectura, por ejemplo arte barroco, colonial, románico  gótico  ya que muchos de sus santos, sus vitrales tienen sus estilos propios.. Se manifiesta en Occidente entre 1860 y finales de los años 1920.


El 21 de noviembre de 1862 se colocó la primera piedra de la que hoy es la Catedral de San Miguel. Este fue un esfuerzo del general Gerardo Barrios y en ella se encuentra la Patrona de El Salvador: la Virgen de la Paz. Muchos de los materiales usados en su acabado fueron traídos del extranjero.

Una de las edificaciones que mas destacan en la configuración de la ciudad de San Miguel es su majestuosa Catedral, desde cualquier punto de la ciudad en que uno se encuentre, las dos puntiagudas y elevadas torres de su fachada sobresalen en las siluetas que dibuja la hermosa Perla de Oriente. Ubicada en el corazón de San Miguel, exactamente frente al céntrico Parque Guzmán  la Catedral refleja la gracia y el empeño que los arquitectos pusieron en su construcción.

Las tejas se importaron de Bélgica; las campanas, de Alemania; los vitrales, que representan figuras bíblicas, fueron elaborados en México, y el altar mayor (de mármol), en el que reposa la imagen de Nuestra Señora de la Paz, fue traído de Italia. En 1913, el papa Pío X elevó a la iglesia al título de Diócesis y se le asignó al obispo de San Miguel el presbítero Juan Antonio Dueñas y Argumento  para que cuidara y apresurara los trabajos de construcción y brindar la Catedral al religioso pueblo migueleño.

La altura máxima es de 57 metros hasta los campanarios y de 25 metros hasta el techo, puede albergar a dos mil personas, lo que la hace la segunda Iglesia Católica con mayor capacidad en El Salvador y la construcción mas alta de toda la Zona Oriental.

En la parte exterior se encuentran las estatuas de mármol del Capitán Don Luis Moscoso que fue fundador de la hoy ciudad de San Miguel y la del General Barrios, bravo patriota militar migueleño, iniciador, como se ha dicho, de los trabajos de la centenaria Catedral, símbolo altivo de la grey religiosa migueleña.
En la Catedral de San Miguel se venera a la Virgen de la Paz, cuya llegada a la ciudad esta sembrada de una extraña y encantadora historia. Sus festividades religiosas celebradas año tras año con gran pompa, llevan los ecos de jubilo por toda la República que se apresta a visitar esta cálida y acogedora urbe, que con su inmensa alegría se engalana para hacer los honores a su digna patrona, que un día  llegada de país extraño, quiso quedarse aquí, para llevar consuelo y contento a la ciudad migueleña.
Una joya arquitectónica que sera un legado para las futuras generaciones, su majestuosidad simboliza la importancia y el protagonismo de una de las ciudades que dieron pie a la creación de El Salvador como una nación.

Reseña de su construcción
Actualmente se ubica en el mismo sitio que ocupaba la antigua Iglesia Parroquial de San Miguel Arcángel, al frente de la plaza de “San Miguel de la Frontera”, conocida hoy como el Parque Guzmán.
Según los documentos eclesiales, la capilla colonial se construyó a mediados del siglo XVI, poco después de la fundación de la ciudad por Don Luis de Moscoso, fechada el 8 de mayo de 1530.
El material principal que se utilizó fue piedra de origen volcánico popularmente llamado “malpaís” o “curruncha”, mezclado con arena y cemento. Cuentan que los fieles acostumbraban cargarlos desde las faldas del Volcán Chaparrastique, organizándose así las famosas procesiones conocidas como “Entradas de Malpais y Arena”, las cuales dieron origen posteriormente a las “Entradas de la Reina de la Paz” que se celebran en la actualidad.

Cabe destacar que el altar es de mármol italiano y sirve de altar donde se entroniza la imagen de la Reina de la Paz. Este magnífico templo tiene capacidad para 2 mil personas y se considera la segunda iglesia católica más grande del país.